Betancuria (Fuerteventura)

3 09 2022

El municipio de Betancuria se sitúa en la parte centro-occidental de la isla de Fuerteventura, a 390 metros sobre el nivel del mar, en un valle fértil entre la tierras áridas del resto de la isla.

Mirador de Guise y Ayose

Antes de llegar a Betancuria nos encontramos dos impresionantes estatuas de bronce que representan a los antiguos reyes de Fuerteventura antes de la conquista en 1402, Guise y Ayose, quienes gobernaban los dos reinos en los que se dividía la isla: Jandía y Maxorata.

Villa histórica de Betancuria

La villa de Santa María de Betancuria fue fundada por los conquistadores normandos  hacia el año 1404, durante el proceso de conquista de la isla de Fuerteventura, que se desarrolló en los primeros años del siglo XV.

Iglesia de Santa María

Las primeras edificaciones que se levantaron en Betancuria durante el proceso de conquista fueron una torre defensiva denominada Valtarajal y una ermita, en la que el conquistador Jean de Bethencourt colocó en el año 1405 una imagen de la Virgen que había traído de Francia.

Calle de Betancuria

La iglesia de Santa Maria fue edificada en 1410 siendo parroquia única de la isla hasta el siglo XVIII. En 1416 los monjes franciscanos, procedentes de Castilla, abrieron un convento bajo la advocación de San Buenaventura, que fue nombrado patrono de la isla.

En 1424 una Bula del Papa Martín V creó Diócesis de Fuerteventura, cuya jurisdicción comprendía todas las islas Canarias, excepto Lanzarote que contaba con el Obispado del Rubicón. Aquel Obispado fue suprimido en 1430 y su único titular fue Fray Martín de las Casas.

Cactus de la isla

Su emplazamiento en un valle interior, alejado de la costa y rodeado de montañas se debe por una parte a su fertilidad, presencia de agua y riqueza vegetal, en el contexto insular; y, por otra, a que esta ubicación ofrecía cierta seguridad y permitía una mejor defensa ante posibles ataques de los piratas.
Sin embargo, esta situación no pudo impedir las hordas berberiscas de Arraez Xabán en el año 1593 donde quemaron, destruyeron y desvalijaron los principales edificios de Betancuria.

Palmeral de Betancuria

Hasta muy avanzado el siglo XVIII la economía de Betancuria se fundamentó en la agricultura de cereales y la ganadería, básicamente caprina.

Tanto la agricultura como la ganadería dependían de la climatología, de modo que en los años lluviosos se obtenían abundantes cosechas, que permitían abastecer a la población de la isla.

Balcón típico

Los años secos provocaban crisis carenciales que obligaban a la población a emigrar. Pese a ello en el siglo XVIII se registró un importante auge económico, con abundantes cosechas de cereales, a las que se unieron la explotación y comercialización de la barrilla, demandada en los mercados europeos para la obtención de sosa.

Queso majorero

Betancuria continuó siendo capital de la isla y sede del Cabildo, principal órgano de gobierno insular, hasta la primera mitad del siglo XIX, en que la capitalidad pasa a Puerto de Cabras, hoy llamado Puerto del Rosario.

Camino de Pájara

El parque rural de Betancuria es un espacio protegido por sus valores geomorfológicos y etnográficos, destacando el monumento natural de Ajuy.

Plaza de la Iglesia

La gastronomía de Betancuria se ha adaptado a la gran austeridad de recursos que brindan la tierra y el mar circundante.

De carnes, los platos más tradicionales son el conejo en salmorejo y el «baifo» (cabrito). El pescado suele ofrecerse simplemente frito y acompañado con elaborados aliños. Una de las preparaciones principales es el «sancocho», plato en el que se acompaña el pescado con papas arrugas.

También es tradicional el «gofio», alimento prehispánico de origen bereber consistente en una harina de grano luego alimentada con caldo, leche, agua y miel, sin olvidar el Queso Majorero.

Para acompañar los vinos cercanos con D. O. Gran Canaria.

Anuncio publicitario