Ribadavia (Ourense)

7 05 2008

En el interior de Galicia, entre el verde de los viñedos y los prados y el gris del cielo y el granito, se levanta la villa medieval de Ribadavia, capital histórica de la comarca de O Ribeiro.

Un entramado de «rúas» componen el barrio judío rodeado de murallas y salpicado por iglesias románicas, emergiendo por encima de las casas el castillo de los Sarmiento.

Castillo de los Sarmiento

El castillo data del S. XV y perteneció a los Condes de Ribadavia. En su interior se conserva una necrópolis del S. IX-XII.

La muralla primitiva data del S. XII siendo ampliada en los S. XIV y XV y alcanza una altura de hasta 5 metros conservándose en la actualidad tres de las cinco puertas: la Porta de Cerca, la Porta Nova o de Celanova y la Porta Falsa o Postigo.

 

Porta Nova o de Celanova

La Porta Nova o de Celanova da salida al río Miño por el sur de la población, mientras la Porta de Cerca se abre al oeste y la Puerta Falsa o Postigo al sureste por el molino.

Porta Falsa o Postigo

El conjunto monumental de Santo Domingo con su iglesia gótica conserva muestras de arte sepulcral, capiteles historiados y un «ángel gaitero» tallado en piedra que es único en Galicia.

La Iglesia de Santiago del S. XII es la parroquia más antigua de Ribadavia, de estilo románico y en la que destaca el magnífico rosetón.

Iglesia de Santiago

La Iglesia de San Juan de finales del S. XII destaca por su sencillez con rica ornamentación de canecillos y ventanas. En el interior podemos admirar su bóveda románica de cañón.

Iglesia de San Juan

La Iglesia de la Magdalena o Parroquia de San Xes tiene su orígen en el S. XII, aunque posee numerosos elementos posteriores barrocos.

Los deportes naúticos se pueden practicar en el río Miño, el río Avia o el parque acuático de Castrelo. El senderismo se realiza a través de la denominada «Ruta de la historia del vino y del románico».

En el Pazo de Esposende el viajero encontrará la paz en esta tierra gallega rodeado de viñedos y verdes bosques. En el restaurante Plaza o en la Vinoteca O Lagar se pueden degustar los vinos de la D. O. Ribeiro, además de disfrutar del pulpo o merluza a la gallega.

No podemos abandonar Ribadavia sin visitar la Tasca Papuxa, cerca de la Porta Nova, una de las tascas más típicas de Galicia. Como dice su lema «chejar e encher», con lo que al llegar se le dan unas tazas al viajero para que él mismo las rellene de los barriles de la bodega.